Desde León a Milagros de Aranda hay una cabalgada de doscientos cuarenta kilómetros. Pero, "Canales-La Magdalena" Un solo pueblo

Desde León a Milagros de Aranda hay una cabalgada de doscientos cuarenta kilómetros. Pero París bien vale una misa. En Milagros, en su casona, nos abre los brazos la ancha y poderosa humanidad de Vela Zanetti que cae de arriba por la escalera de su estudio como un patriarca arrancado de la misma Biblia, del Antiguo Testamento. Y no hay más tránsito para ver. El pintor -<<así le conocemos en Milagros, por el pintor>>, nos ha dicho un viejo labrador - se derrama en una catarata de palabras y nos habla de su casa, de aquella en la que estamos. <<Mi vida más que otra cosa ha sido una reconquista de la vida>>. Estamos en la casa donde nació, la casa que él mismo hizo crecer sobre las puras ruinas de aquella otra en la que había nacido. <<Aquí nací y pronto me llevaron a León>>