Y ahora que ando un poco inspirada, no mucho porque han vuelto los calores, os voy a contar una anécdota años "A", ocurrióme de piquiñina en la escuela de la Magdalena con Dª Lidia, "Punto y Aparte".
Érase una tarde cualquiera de un mes mismamente Mayo, con calor, y la siestina apetecía "Oiga", quizas hubiéramos comido cocido ¡, tarde larga y un run-run- de fondo se oía... A ver, dijo profe, la clase de la tarde se dedicará a las capitales de Europa:
- Luisa, capital de España?- Madrid (qué coño, esa la sabía yo también), pa mí que era la enchufada.
- Petra, capital de Francia?-París (otra igual de facilona)
.... Dª Lidia, ahora vamos a cambiar; os pregunto la capital y me contestáis el país.....
- Pili, dónde está Roma?... en Italia profe... Biennnnnnnnn...
- Gumersinda, dónde está Bruselas?.. en Bélgica profe... Biennn y aplausos.
(Hago un paréntesis porque yo estaba en el séptimo cielo, creo que roncaba y todo, eso si no me bababa como el tal Simpson).
- Y llegó mi turno, "petada del todo", Ana Mariaaaaaaaa, mi no responder.. Ana Maríaaaaaaaa, tal de lo mismo... Al final oigo una voz de ultratumba que dice:
Anaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa, dónde está Berna ¡
Confundida por el bocinazo, y ausente aún, -vaya usted a saber con quién soñaba-
Qué, qué, que dónde está Berna?, pues dónde va a estar: EN CASA PACO.
PD.-Para los que no conocen casa Paco, era una tienda de ultramarinos del pueblo y el tal Berna regentaba a veces la tienda.
De repente sólo oí una gran carcajada, era de la maestra, las niñas de momento no reían, pero al final aquello parecía un anfiteatro... todos al unísono en una sola risa.
Total, que yo, como no me había enterado de nada, pues me reía también.
Ésta historia no se la conteis a nadie, que luego todo se sabe.
Dª Lidia no me castigó y es raro, raro, pero con el carácter que tenía-digo ella-, y la panzada de risa que apañó, le alegré la tarde.
No hay mal, que por bien no venga-O algo parecido-