PACTOS POSTELECTORALES....

PACTOS POSTELECTORALES.

Unidas Podemos intenta liderar carteras sociales en el Gobierno.

Sánchez e Iglesias vuelven a verse este martes en el Congreso en el inicio de las negociaciones para la investidura.

ANA MARCOS.

CARLOS E. CUÉ.

Madrid 10 JUN 2019 - 09:26.

Llegó la hora. Pedro Sánchez y Pablo Iglesias volverán a verse este martes en el Congreso después de más de 15 días sin hablar. Su última cita fue hace más de un mes. Entonces parecía factible que Unidas Podemos entrara en el Gobierno siempre que no fueran ministerios de los llamados de Estado. Tras los malos resultados del grupo de Pablo Iglesias en las municipales y autonómicas, que le han debilitado, Pedro Sánchez parece cerrado en banda: no quiere ministros de Podemos. Pero Iglesias está preparado para un pulso largo con un objetivo: lograr dirigir carteras sociales. Su modelo es el pacto de la Comunidad Valenciana.

Las cosas han cambiado mucho desde el pasado 8 de mayo. Iglesias salió de La Moncloa convencido de que la entrada en el Gobierno era posible. Desde el PSOE admitían que esa idea estaba encima de la mesa para “amarrar” los imprescindibles 42 escaños de Unidas Podemos, aunque no era ni mucho menos su opción favorita. “Nos hemos puesto de acuerdo en que vamos a trabajar para ponernos de acuerdo”, dijo Iglesias. Todo parecía ir sobre ruedas.

Pero las cosas se han complicado mucho. La tensión es muy evidente. Sánchez juega ahora a “ampliar el espacio” y trata de presionar a Ciudadanos y PP para que se abstengan y así rebajar aún más el precio de Iglesias. En La Moncloa ahora insisten en que no está encima de la mesa ningún ministerio para Podemos. Creen que es posible la llamada geometría variable, esto es buscar mayorías diferentes para cada ley, para no depender siempre de Iglesias y hacerse con el espacio del centro político. Pero algunos dirigentes socialistas dudan de esta estrategia de presión al aliado principal. Temen que tensar tanto la cuerda pueda romperla y abrir la puerta a una legislatura infernal en la que, si Podemos se baja de alguna votación clave, como pasó con la senda de gasto o la reforma de los alquileres, Sánchez quede en manos de un Albert Rivera que ya ha dejado claro que no piensa ayudarle. Pero La Moncloa mantiene su estrategia y cree que la presión social y mediática e incluso la tensión interna acabará obligando a Iglesias a renunciar a la idea de entrar en el Gobierno. Sánchez llevará personalmente la negociación con Iglesias, Rivera y Pablo Casado. Y el PSOE elegirá hoy una comisión para negociar con los grupos más pequeños en la que estarán José Luis Ábalos, Carmen Calvo y Adriana Lastra.