Yo me operé en un hospital privado. A lo mejor en lo público no sea así. Lógicamente si no te gusta una sopa no la vas a comer y te daban otra opción.
NO sé si ahora se sigue lo mismo, pero si que es verdad, al menos en Salamanca que todos los días pasaban con los menús y elegías, naturalmente dentro de lo que te podían servir en relación a tu estado.
Claro, claro, tienen más de un plato por si no te gusta el menú.