Estos días en que -algunos- conseguimos aproximar los...

Estos días en que -algunos- conseguimos aproximar los sentimientos a la realidad del entorno en que vivimos (y pido se me disculpe por la inmodestia al incluirme) estos días -repito- uno se aproxima, un poco más, a la idéa de que tanta capacidad de hacer, gratificando a los demás y -a la vez- a uno mismo... debe ó debería poder seguir latiendo, después de la trascendencia mortal...

De otra parte y aproximándome a la realidad, debo reconocer que la inmensidad del universo y nuestra importancia -real- en dicha inmensidad, no son indicadores -precisamente- de lo que intento reflexionar, al principio... Y es que ¿acaso no es indicativa nuestra insignificancia -respecto del universo- para discernir que -ni con mucho- somos lo más importante en una supuesta "creación"..? Y si -cual parece ser- nuestra insignificancia es la que es, dentro del cosmos: ¿Por qué nos hemos de erigir en sus principales protagonistas, en lo universal y esperar una hipotética "vida eterna"...?

En fin...

Saludos.