Lo que todavía colecciono, y me encanta, son pines de lo que sea. Recuerdo que empecé a coleccionarlo en un cursillo de agente de desarrollo turístico que hice en en Inem de Burgos. Nos llevaban a ferias de turismo y en cada estand nos regalaban de todos los lugares de España, folletos (que también tengo una buena colección), postales, bolígrafos, caramelos, gorras... una pasada con lo bien que estaba España en aquellos años y lo que se gastaba en propaganda...