Lo más atroz de todo es vivir eternamente de recuerdos.

Meparece atroz lo que dices María Eloisa, las añoranzas no tienen nada de cursilería no creo que recordar tu infancia tu niñex sea cursi si matamos esos recuerdos dejamos de tener pasado y por lo tanto ríces. Pes yo si que añoro mi pueblo y no pasa un verano en el que no pase allí todas mis vacaciones y siempre que tengo oportunidad allí voy lo que más me duele es que ya no tengo mi casa y daría lo que fuera por hacerme una ´pero en estos momentos no estan las cosas para ponerse a ello esperemos a que pase esta tormenta para poder conseguir mi sueño haber si los bancos empiezan a soltar dinerillo haré mi casa en el lugar más soñado de mi vida que es mi puieblo y entonces ya podré morirme tranquila. Nuestro sello de identidad es nuestros pueblos un saludo.

Lo más atroz de todo es vivir eternamente de recuerdos.