Hola Lú:
¿Cómo se llama tu gatita? Es preciosa. Yo casi siempre he tenido gatos rubitos. A mi hijo pequeño le gustaban mucho. Pero ya te digo, ahora lo que hay en casa son perros.
Espero que salga todo bien a los dos, a la gatita y al perro. Y que se recuperen pronto.
Esta tarde, que mi marido no me podía acompañar, me he ido a dar una larga vuelta y resulta que había berros, que me encantan y hasta los he cenado en ensañada con granada y un ajito. Una delicia. Y otra vez que he vuelto a coger setas. Otra vez sin buscarlas, en el camino de las pobres fuentes, como las llamo yo. Pero enormes, que me he sorprendido. Así que he vuelto a casa contenta de mi fructífero paseo. Es una delicia vivir en el campo, por la tranquilidad, la naturaleza, aunque esté tan perseguida. ¡Qué buena pareja hacemos el campo y yo! Y ahora se están terminando mis manzanas de cocer, sin agua para hacer mañana el dulce de manzana con cerezas. Todo natural y estupendo. Me da gusto hacer cada día algo distinto. Si no hubiera sido por el truco de las cerezas a lo mejor hubiera tardado en hacerlo pero así ha sido un aliciente más.
Es lo que tiene vivir en un pueblo, aunque tengas que pelearte con la gente por defender tus ideas. Y es hasta otro aliciente más, porque lo que cuesta, vale doble.
Un saludo y te mando el trébol de la suerte.