Mari pregunta a Juan de cuantos metros quiere el piso...

Claro, pero eso lo sabe Mari, los demás no, señor potentado.
Bueno, si en realidad vas a vender esos pisos, te deseo muy buena venta.
Saludos.

NOEMI. Según Juan, Mari lo sabía. Más a mi favor... Mari le dice: " cuántos metros quieres qué tenga". Señal de que no se refiere al piso que vende Juan.

Bueno, eso creo que no va ninguna parte, porque Mari puede saber que vende un piso, pero no sabe las características y por eso ahora pregunta por las dimensiones del mismo.
El problema está en la forma verbal imperativa CÓMPREME que da origen al conflicto por la dualidad de significados que genera.

NOEMI. Bueno, pues ahora has metido a Marí en otra anfibología. Caben las dos premisas. Mari no sabe cuántos metros tiene el piso. ¿Qué piso? ¿el que tiene Juan o el que "se desea comprar ". Solo Mari nos puede sacar del lío.

Mari pregunta a Juan de cuantos metros quiere el piso que le va a regalar.
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
Se nota que estamos en Chistes.
Ya tenemos otra anfibología.
Ya verás mañana Ángel.

Oye, esta palabra es del estilo de los palabros de Cabrero.