¿Le quedará a Marlaska un mínimo de dignidad?...

¿Le quedará a Marlaska un mínimo de dignidad?

OKDIARIO- ACTUALIZADO: 26/06/2021 06:48.

Los intentos del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, de acabar con la carrera profesional del coronel Diego Pérez de los Cobos, destituido ilegalmente por cumplir con una disposición judicial que le impedía dar cuenta del contenido de las investigaciones sobre la autorización de la Delegación del Gobierno de Madrid a la manifestación del 8-M, se toparon con la justicia, que se pronunció a favor del coronel. Tras la purga del ministro en la cúpula de la Guardia Civil, el problema para Marlaska es que De los Cobos ocupa el primer puesto de la lista de méritos para ascender a general. En los próximos meses está previsto el pase a situación de reserva de dos generales de brigada en la cúpula de la Benemérita y el ministro tendrá que pasar por encima del hombre que dirigió la respuesta policial al 1-O para evitar su ascenso.

O sea, Marlaska puede volver a dar rienda suelta a su sectarismo o, por una vez, guiarse por estrictos criterios de justicia en función de los méritos del coronel, que ya fue apartado -purgado sería más correcto- de la carrera al generalato en mayo de 2020. Su hoja de servicios es impecable y ha sido calificado por sus superiores durante los dos años que ha ejercido el mando de la Comandancia de Madrid con una nota de 9,76 y 9,81 sobre 10. Esto es, si Marlaska no le nombra general será porque su sectarismo le impide guiarse por los criterios de objetividad y mérito que deben marcar las promociones.

Marlaska, juez de carrera, ha dejado su impronta sectaria en el Ministerio del Interior. Son muchas las voces que le dan por amortizado como ministro. Está quemado. También ha dilapidado su prestigio como juez. Si le quedara un conato de dignidad, permitiría que el coronel Diego Pérez de los Cobos alcanzara el generalato, pero hace tiempo que Marlaska se precipitó por el terraplén del descrédito. Pase lo que pase, Pérez de los Cobos mantendrá intacta su dignidad. El ministro se ha ido dejando la suya a lo largo de una gestión que parece tocar a su fin. ¿Le quedará un atisbo de honra?