Las 3 claves de la semana política...

Las 3 claves de la semana política
Indultos, fondos, Villarejo, Ibex-35 y viceversa

JOSÉ LUIS ROCA
4
Se lee en
minutos
Albert Sáez
26 de junio del 2021. 18:13
9
Comentarios
Las relaciones entre los poderes no son nunca fáciles en democracia. El absolutismo se basaba precisamente en el ejercicio monolítico del poder. De la fuente de la voluntad divina, expresada a través del sumo pontífice, emanaba la autoridad del emperador y así sucesivamente hasta el más diminuto de los señores feudales. Leyes, propiedades e ideas se imponían sin fisuras con la fuerza de la cruz y de la espada. Uno de los atributos de la Modernidad es justamente la ruptura de ese poder absoluto, tanto de los gobiernos y de los jueces respecto del monarca como de la sociedad civil respecto del Estado. Con todo, hay zonas de frontera, no siempre fáciles de perimetrar. Hay grandes empresas que dependen de concesiones del Estado y hay grandes empresas que, en la medida que gestionan servicios esenciales, el Estado depende de ellas. La concesión de los indultos ha puesto en la picota las relaciones entre poder político y poder económico durante los últimos días. Especialmente ha tensado las relaciones entre el PP y la patronal CEOE.

El día que Aznar se emancipó

Explica José María Aznar en el primer volumen de sus memorias que una de las primeras decisiones que tomó cuando asumió el timón del Partido Popular (cuando Fraga soltó aquello de ni tutelas ni tutías) fue buscar una fuente de financiación alternativa a los empresarios de la CEOE. En los años 80 del siglo pasado, durante las mayorías absolutas de Felipe González, se daba por hecho que la patronal ponía y quitaba candidatos en la formación de centroderecha porque era quien pagaba la fiesta. Para lograr ese cometido, Aznar puso al frente de las finanzas del PP a Álvaro Lapuerta, con quien había intimado en su etapa de inspector de Hacienda en Logroño. Podríamos decir que era uno de sus mentores políticos. Lapuerta tuvo durante años de máximo ejecutivo en ese área a Luis Bárcenas. Y el resto de la historia ya es conocido. Este detalle tiene hoy su importancia por la palabras de Aznar sobre la CEOE tras las declaraciones de su presidente Antonio Garamendi a favor de la decisión del Gobierno sobre los indultos a los presos del procés. Con ese tono cañí que desprende a veces el expresidente, soltó eso de que “son días para apuntar y no olvidar”. La frase de Aznar culminaba una semana de ataques de la cúpula del PP que vino a decir que los empresarios habían vendido su apoyo al Gobierno en los indultos a cambio del plato de lentejas de los fondos europeos.