O sea, analizado detenidamente, un verdadero desastre...

O sea, analizado detenidamente, un verdadero desastre de criatura. Por lo que me cuentas, en tu pueblo habéis pasado de la estupidez del cordero despistado a la cretinez del asno soberbio y presuntuoso. Habéis abandonado los dogmas para meteros en las teorías de cuatro impostores que han hecho lo posible para instalaros una pseudocultura ficticia. Creo que en el trasero en vez de secuelas teológicas y místicas lleváis una guindilla que os hace trotar como jumento a más y mejor. A pastar, compadre, que eso te pondrá gordo y lustroso, aunque tu cerebro sea de corcho extremeño. No puedes predicar la verdad absoluta, porque no tienes la capacidad suficiente. No puedes atribuirte nada, porque esa es la prerrogativa de los mamarrachos intelectuales, y puesto que reconoces que eres un borrego, sólo me queda desearte que te esquilen bien.