Tu problema y el de otros, es que, en cierta etapa...

Tu problema y el de otros, es que, en cierta etapa de vuestra vida esperábais buenas cosas de alguien, que no tan sólo no os las dio, sino que, incluso, se mostró desagradable e ingrato con vosotros. Pues bien, en lugar de obsesionaros por esta decepción, observad mejor a vuestro alrededor; hay otras personas que, sin lugar a dudas, están deseosas de ayudaros; si permanecéis concentrados en vuestra decepción, preocupados únicamente en enviar malos pensamientos a quienes os han decepcionado, no veréis a estos otros amigos que se acercan a vosotros. También en este sentido las pruebas son útiles: os obligan a hacer o descubrir lo que no haríais, ni descubriríais sin ellas.