ESTO NO ES XENOFOBIA ESTO ES INDIGNACIÓN
Cuando un día tú vas a una piscina, en un gimnasio, y encuentras a una súbdita musulmana metida dentro del yacusi con toda su ropa, vestido, velo, incluida su ropa interior, que se supone llevaría, no es que esté en contra de la persona, del ser humano, uno siente indignación porque para entrar allí a ti te exigen llevar un bañador, un calzado idóneo, un gorro para la cabeza, y si te falta o sobra algo de esto te impiden entrar en el recinto. ¿Cómo es entonces que esta mujer estuviera allí con aquella indumentaria?
Yo protesté por este hecho que iba en contra de las normas de higiene y de obligado cumplimiento de la empresa porque suponía una discriminación para todos los usuarios de mi país que no afectaba, sino que favorecía, a aquella ciudadana marroquí.
La respuesta del monitor fue que esa era a forma de vestir que utilizaban la moras en su país.
No acepté aquella injusta e indigna respuesta y le dije: Esto es España y aquí cualquier persona que escoja vivir entre nosotos tiene que cumplir nuestras normas y si no les gustan que se vaya a su país porque ellos vienen porque quieren ya que nosotros no le hemos obligado.
Hice mi protesta por escrito, que secundaron otros muchos clientes, diciendo que no asistiríamos más al centro si no se atendía nuestra petición.
Ya no hemos vuelto a ver a esta Sra en la piscina parece ser que prosperó nuestra justa petición.
No es este el único caso pero lo que está claro es que debemos protestar ante actitudes como estas, que nadie de fuera venga a cambiar las normas y hábitos de nuestro país sino que las acepte y las cumpla para convertirse en ciudadanos de pleno derecho.
Así obligaremos también a esos políticos tan permisivos a que piensen más en su país y en sus súbditos nativos, por lo menos de igual forma que lo hacen con los que vienen de fuera, porque hasta ahora esos eran, en muchas cosas, los privilegiados. Aquí todos debemos ser españoles.... ... (ver texto completo)
Cuando un día tú vas a una piscina, en un gimnasio, y encuentras a una súbdita musulmana metida dentro del yacusi con toda su ropa, vestido, velo, incluida su ropa interior, que se supone llevaría, no es que esté en contra de la persona, del ser humano, uno siente indignación porque para entrar allí a ti te exigen llevar un bañador, un calzado idóneo, un gorro para la cabeza, y si te falta o sobra algo de esto te impiden entrar en el recinto. ¿Cómo es entonces que esta mujer estuviera allí con aquella indumentaria?
Yo protesté por este hecho que iba en contra de las normas de higiene y de obligado cumplimiento de la empresa porque suponía una discriminación para todos los usuarios de mi país que no afectaba, sino que favorecía, a aquella ciudadana marroquí.
La respuesta del monitor fue que esa era a forma de vestir que utilizaban la moras en su país.
No acepté aquella injusta e indigna respuesta y le dije: Esto es España y aquí cualquier persona que escoja vivir entre nosotos tiene que cumplir nuestras normas y si no les gustan que se vaya a su país porque ellos vienen porque quieren ya que nosotros no le hemos obligado.
Hice mi protesta por escrito, que secundaron otros muchos clientes, diciendo que no asistiríamos más al centro si no se atendía nuestra petición.
Ya no hemos vuelto a ver a esta Sra en la piscina parece ser que prosperó nuestra justa petición.
No es este el único caso pero lo que está claro es que debemos protestar ante actitudes como estas, que nadie de fuera venga a cambiar las normas y hábitos de nuestro país sino que las acepte y las cumpla para convertirse en ciudadanos de pleno derecho.
Así obligaremos también a esos políticos tan permisivos a que piensen más en su país y en sus súbditos nativos, por lo menos de igual forma que lo hacen con los que vienen de fuera, porque hasta ahora esos eran, en muchas cosas, los privilegiados. Aquí todos debemos ser españoles.... ... (ver texto completo)