LA QUE SE AVECINA...

LA QUE SE AVECINA

Estamos ahora mismo en este país en una situación política, hasta ahora desconocida en nuestra joven democracia, que ha llevado a la formación de un gobierno de coalición de izquierdas que, por su particular y variopinta procedencia ideológica, hace que todos estemos preocupados por el resultado de esta amalgama de partidos y de ideas, a la hora de gobernar y de resolver los múltiples problemas que nuestro país viene arrastrando tras la sucesión de cinco elecciones en solo un año, y medio año más de gobierno en funciones.

El mayor problema está en que todos los partidos que han posibilitado la elección del Presidente del Gobierno, que son muchos, llevan en su mochila su propio problema que por medio de chantajes han tratado de obligar a Sánchez que se los solucione, a veces con concesiones de tipo económico, otras de tipo independentista, otras de tipo constitucional o institucional, que ponen en peligro la estabilidad, la integridad y la paz de nuestro país, al que ninguno de los partidos que han intervenido en la posibilidad del acuerdo han tenido en cuenta, solo han tratado de solucionar su propio problema aunque eso nos lleve aumentar e incluso a dificultar la solución de los problemas del país y hasta su integridad.

Esto pone de manifiesto que en política todo es válido, y que algo tan sucio y repugnante, como el chantaje es un instrumento aceptado y utilizado impunemente por los que ponen la política al servicio de sus ideas y de sus intereses particulares importándoles un bledo los intereses generales de la nación.
Y digo yo: ¿Se puede ser presidente de un país aupado al sillón por aquellos que manifiestan abiertamente que ellos no quieren a ese país, a su constitución, a su Rey y que han llegado a delinquir tratando de romper en pedazos su territorio? Pues no, yo estoy seguro que una gran mayoría de españoles no aprueban esta manera de alcanzar el poder.
Es tan fácil como que ahora nuestro gobierno va a tener que atender primero las peticiones de todos los que le han permitido conseguir la vara de mandar y ello irá en contra de lo que necesita, exige y merecen todos los españoles.

Vayamos por partes:
Pedro Sánchez a conseguido seguir siendo el presidente, que es lo que él quería, que seguro no es lo que querían multitud de socialistas ni la mayoría de los ciudadanos, en la forma que lo ha hecho.

Pablo Iglesias que vino criticando a la casta, a todo el que tenía un chalet, diciendo que el viviría en un piso, donde conociera a sus vecinos, al panadero y a todo el barrio, se convierte rápidamente, en la casta de la casta, se compra un chalet de millonarios y encima le ponen en la puesta a una pareja de la Guardia Civil, que él en un principio alentaba a atacar, para que protejan su intimidad, su propiedad y por supuesto para aunque allí los ocupas no tengan nada que hacer.
Pues a este. al parecer, los reyes magos le han regalado dos ministerios, (esto es insólito, nunca visto en España y yo creo que en el resto de Europa y del mundo democrático).
Uno para su pareja, y para él la vicepresidencia, casi ná, este que era anti capitalista yo no se que va a hacer ahora con tanto dinero.

A mi paisano Rufian, pues su familia remanece de una pedanía de Alcaudete, (Jaén), la Bobadilla este y a su jefe Junqueras, les van a dar permiso para que hagan un referendum en Cataluña para decidir su independencia, les darán el indulto para que todos los que hay en la cárcel por haber intentado independizarse ellos solos por su cuenta y hasta les permitiran a Puigdemont y a Junqueras que vayan a Europa a contar allí lo malos que somos los españoles y los buenos que son ellos.

Al P. N. V., al Nueva Canaria, a Bildu, a Benega y a Teruel Existe, le darán todo aquello que hayan firmado para que Sánchez pueda seguir utilizando a su antojo las fuerzas aéreas.

Y a España que le darán: mucho más paro, muchas más deudas, muchos, muchísimos impuestos, mucha incertidumbre con las pensiones, la propiedad privada, mucha más inseguridad, muchos enfrentamientos con el independentismo de todos los lugares del país, y me temo que como con todos estos problemas económicamente no podrán atender a los más pobres, a los más necesitados, el bienestar social que debería haber sido la primera acción de un gobierno que se llama progresista, y entonces diremos si mereció la pena gobernar de esta manera. Lo malo es que el daño será muy difícil, por no decir imposible solucionar. porque este iluminado ha cambiado de un plumazo: lo de: “España ni se compra ni se vende.”