ENEBROS Y PINOS PODADOS...

ENEBROS Y PINOS PODADOS
Eran años de trabajo sobre los campos de Soria, era labrar desde abajo sin olvidar la memoria. Pinos que fueron podamos para quemar en hogares, enebros siempre cuidados en los distintos lugares. Eran tiempos de problemas para poder ir andando, con sus temidos esquemas las gentes lo van contando. Leñador marca tus pinos y deja crecer las ramas, no son momentos divinos lo que las brujan reclaman. En estos montes hermosos con madera muy lograda, hoy los pinos son dichosos y más en la madrugada. Habrá que cuidar el monte, y saber lo que le falta, hay caminos con resorte que quieren no ver errata. Hay montes que siguen siendo una fuente de esperanza, algunos van presintiendo un calor que de templanza. El Duero va perfilando sombras que van desatadas, el agua sigue brillando en las noches trastocadas. Los enebros crecen poco, sus ramas viven calladas, sabiendo que poco a poco pueden hacer temporada. Leñador no pierdas tiempo en tus horas caviladas, que puede llegar el viento dejando tristes andadas, Soria sabe de pinares y de noches encantadas, se pierden en sus hogares voces que son desgarradas. G X Cantalapiedra.