Este juan 217 no tiene N. P. I. Escibir un Quijote...

Este juan 217 no tiene N. P. I. Escibir un Quijote dice, ja ja, ni lo intentes porque puedes quedar a la altura de Avellaneda. LEE UN POCO DE ESTO, A VER SI SE TE PEGA ALGO.
Hubo un tiempo en que se necesitaba la magia para quitar el hambre, y llegó el mago y se llevó a los hombres, gracias a este gesto desapareció el hambre, pero el pueblo necesitaba más del mago, y este hizo otro gesto y acabó con las injusticias, pero provocó una guerra entre magos de los pueblos vecinos, entonces aparecieron los políticos y con otro gesto acabaron con el mago y con las guerras por la lucha del pantano.
No me cabe ninguna duda que el pueblo salió beneficiado, casi 10 años de trabajo le cambiaron la cara y ahora reluce brillante, con una buena paga, pero añorando a su otro medio pueblo que dormita bajo sus aguas.
Esta es la historia de mi pueblo, quedándose dormida, sin que nadie la echara en falta, en sus calles se aprecia ese silencio en honor a su gente olvidada, sus campos son una inmensa dehesa, y en cierto rincón, aún se conserva ese molino, cubierto de agua y musgo, junto a él, un puente labrado con pizarra. mi pueblo es como un amanecer que surge de las aguas que aun respiran el óxido de los hierros que cubrían sus ventanas, mi pueblo es un recuerdo de esos racimos de geranios que colgaban del balcón, mientras... la vida sigue, y una lagartija errante trepa las encaladas tapias de la calle.
El arroyuelo ya no trae las aguas claras y gélidas que buscaban su ocaso frente a los adarves. Mi pueblo es calor en la siesta, es el frío del mismísimo hielo, mi pueblo son tardes de brasero, donde no se escriben cartas, pero se cantan en las tardes de baraja, mi pueblo son hombres y mujeres que trabajaron la tierra, labrando los surcos, pero que ya no quedan, casi todos partieron buscando un sueño...