El astrolabio.
Por Bieito Rubido:
Fraga.
Bieito Rubido.
El 07 may, 2019.
La ingratitud es una de las mayores taras del ser humano. El Ayuntamiento de La Coruña, que no su ciudadanía, ha perpetrado un delito de ingratitud con Manuel Fraga: su pleno municipal le retiró el título de Hijo Adoptivo de la ciudad, lo que representa una ignominia. Lo más grave es que ha votado a favor de la retirada el PSOE local con un discurso especialmente agresivo. Es decir, que los socialistas coruñeses votan en contra de un ponente de la democrática Constitución del 78, en contra de la reconciliación nacional y en contra del PSOE de Felipe González, quien con Adolfo Suárez y Manuel Fraga, entre otros, y a base de pactos y consensos, trajeron la democracia a España. Manuel Fraga, que pudo ser millonario, murió pobre en un pequeño piso del barrio de Argüelles de Madrid, después de dedicar su vida al servicio del bien común de los españoles. Una trayectoria que también tuvo errores, pero que difícilmente podrán igualar los concejales de medio pelo que ayer quisieron humillar su memoria en La Coruña. Esto no es solo una ruptura con Fraga y Felipe González, es una ruptura con la convivencia.
Por Bieito Rubido:
Fraga.
Bieito Rubido.
El 07 may, 2019.
La ingratitud es una de las mayores taras del ser humano. El Ayuntamiento de La Coruña, que no su ciudadanía, ha perpetrado un delito de ingratitud con Manuel Fraga: su pleno municipal le retiró el título de Hijo Adoptivo de la ciudad, lo que representa una ignominia. Lo más grave es que ha votado a favor de la retirada el PSOE local con un discurso especialmente agresivo. Es decir, que los socialistas coruñeses votan en contra de un ponente de la democrática Constitución del 78, en contra de la reconciliación nacional y en contra del PSOE de Felipe González, quien con Adolfo Suárez y Manuel Fraga, entre otros, y a base de pactos y consensos, trajeron la democracia a España. Manuel Fraga, que pudo ser millonario, murió pobre en un pequeño piso del barrio de Argüelles de Madrid, después de dedicar su vida al servicio del bien común de los españoles. Una trayectoria que también tuvo errores, pero que difícilmente podrán igualar los concejales de medio pelo que ayer quisieron humillar su memoria en La Coruña. Esto no es solo una ruptura con Fraga y Felipe González, es una ruptura con la convivencia.