Dime con quién andas y te diré con quién vas.

Y un gran hombre. Entramos en Europa gracias a él.

Detrás de cada hombre, cuando de verdad es grande, hay una gran mujer.

Y cuando ese hombre deja de ser grande, para vivir en la mediocridad, también tiene detrás a una mujer mediocre.

Dime con quién andas y te diré con quién vas.