ROSALÍ. Pues sí, buena reflexión....

Tierno Galván era agnóstico. Siendo alcalde intentaron quitar el crucifijo de su despacho, a lo que respondió:
"La contemplación de un hombre justo que murió por los demás no molesta a nadie. Déjenlo donde está.”.

Una buena reflexión.

ROSALÍ. Pues sí, buena reflexión.

Un saludo.