CUANDO DIVISO ALICANTE...

CUANDO DIVISO ALICANTE

Al divisar Alicante mi corazón se emociona,
es lo mismo que un sedante que todo lo soluciona.
Sin sentir nunca las dudas de caminar adelante,
ni ver razones absurdas que dejan interrogante.
Todo lo llevo conmigo sin ver nada delirante,
en esta tierra el amigo siempre me habló de Alicante.
Dicen que marcha la vida con un ritmo trepidante,
y en la noche más perdida quieres sentirte elegante.
No sé por dónde camino, ni sé si es alucinante,
ni quiero ser adivino en cualquier caso expectante.
Voy divisando palmeras con la vida por delante,
viviendo las primaveras en la ciudad de Alicante.
Hay sombras que son esperas, y mucha luz muy brillante,
cuando piso las aceras no quiero ser arrogante.
Que no digan que la vida, se vive toda al volante,
existe luz encendida sin pensar en un amante.
En las playas más divinas que se ven por Alicante,
sus arenas son tan finas que vuelan cualquier instante.
El reloj viene deprisa con su sonido constante,
sin comentar si su brisa es del Puerto de Alicante.
Me hablaron de buena suerte por las tierras de Levante,
sin decirme que la muerte nada sabe de talante.
Cuando la tarde termina y ves todo tan pasante,
la mente si determina que busquemos un calmante.
No vale pasar de todo, ni sentirte un gran pedante,
en la vida ves el lodo del embustero farsante.
No sirve pedir consejos ni querer ser un mangante,
cuando sientes los reflejos de tu mundo mal pensante.
Los reflejos van volando sin buscar acompañante
en el cielo están brillando para ser un relajante.
Si sueñas con la esperanza viviendo con buen semblante,
abraza bien la templanza en la ciudad de Alicante.
G X Cantalapiedra.