LA MADRE NATURALEZA EN LA MANCHA...

LA MADRE NATURALEZA EN LA MANCHA
La Madre Naturaleza impone sus condiciones,
y aunque cometa torpeza ella no explica razones.

Cuando la tormenta brama con sus relámpagos fieros,
sobre la tierra reclama sus instintos verdaderos.

Volcanes y terremotos les viene a veces lanzando,
sin tener muchos devotos ella sigue caminando.

Ciclones que son castigos de sus vientos temerosos,
que nunca serán amigos de los momentos dichosos.

La Madre Naturaleza deja fríos heladores,
y es grande su fortaleza cuando anula a los traidores.

Vientos que rompen murallas y vienen siendo un desastre,
queriendo trazar batallas con su penoso desgaste.

En los rasos de La Mancha demuestran sus vibraciones,
y entre temores engancha a gentes con religiones.

Naturaleza brillando sobre viñedos floridos,
olivares que pensando temen el sentirse heridos.

Arrastrando enfermedades con sus malas intenciones,
son tormentas y maldades que nunca dan emociones.

Naturaleza manchega que deja campos perdidos,
sin ver que nunca se pliega en momentos deprimidos.

Las nubes van descargando en lugares escogidos,
mientras seguimos pensando que son juegos divertidos.

La Madre Naturaleza no ve los campos perdidos,
ni suelen tener nobleza sus desastres distinguidos.

Campos que siguen despiertos sin entender de castigos,
algunos pueden ser muertos sin que pasen muchos siglos.

La sequía va llegando y marcando muchos dichos,
La Mancha lo va notando al comprender los caprichos.

Naturaleza salvaje que va marcando caminos,
Tememos su vasallaje con penosos desatinos.
G X Cantalapiedra.