Parece mentira que cuando hay problemas puntuales de todo tipo en un mundo globalizado, donde todos los países todos hacen fuerte sus pocas o muchas armas, en España haya una oposición tan irresponsable, dedicada exclusivamente a agrandar problemas, agrandar armas de los otros y a denostar a su gobierno buscando réditos partidarios, sabiendo que producen daños profundos a todos los ciudadanos.