ME ALEGRARÍA VER ESTA PESTE ERRADICADA
Cuando sobran las razones y el corazón va sufriendo, quisieras ver emociones por dónde vives sintiendo. Tengo mi mente pensando en los sufridos momentos, de ver gente caminando y con pocos alimentos. Hay mentes que van brillando sobre penosos intentos, el hambre viene aflorando sin entender de lamentos. Quisiera ver esta peste alejada de mi pueblo, para que así no nos reste ni ver como a veces tiemblo. Siento lamentos en niños que viven sin alimentos, quizá reciban cariños en esos malos momentos. Esta peste maldecida que se va llevando humanos, deja la senda elegida entre muchos sueños vanos. Siempre las pestes dejaron sufrimientos inhumanos, que solo el tiempo arreglaron mientras temblaban las manos. Quisiera borrar la etapa por donde vamos pasando, y poder doblar el mapa viendo a todo el mundo andando. No tengo las soluciones, ni puedo sentirme mago, más siento las negaciones al percibir tan mal trago. Si yo tuviera la llave de arreglar este mal paso, podría lanzar la clave de borrar cualquier fracaso. Esta peste maldecida, que vino dejando estragos, quiere mostrar cierta herida haciendo caminos largos. En La Castilla Sedienta, donde se ven bien los campos, la vida a veces se inventa para evitar más los llantos. Caminos que son historia, vientos que dejan calvarios, pestes que fueron memoria sin respetar los sudarios. A veces lo ecos suenan, dicen que arrastran salarios, pero son puro venenos con gestos insolidarios. Cuando se vaya la peste y brille el verdor del campo, en ningún paisaje agreste quisiera ver un mal llanto. Castilla llena de sombras, con caminos recordados, donde mirando te asombras en los viñedos cuidados. En La Castilla Profunda entre sueños despistados, alguna peste rotunda dejo pueblos sepultados. La Perdiz maldita peste, San Martín pueblo borrado, en aquel penoso ambiente con la cal era inundado. Hoy lo tenemos presente, los años se van pasando, siempre guardara la mente lo que vamos aguantando. Cuando volvemos al ciclo de ver los virus borrados, nos sentiremos más ricos al vernos tan liberados. Todo pasa y todo queda, lo dijo Antonio Machado, hoy parece existir veda sobre el camino pisado. Volveremos a la vida de caminar encantados, llevando la frente erguida y el sabor de liberados. Esta peste maldecida cargada de sobresaltos, hoy no la vemos vencida y puede dejar sus llantos… G X Cantalapiedra. 13 – 5 – 2020.
Cuando sobran las razones y el corazón va sufriendo, quisieras ver emociones por dónde vives sintiendo. Tengo mi mente pensando en los sufridos momentos, de ver gente caminando y con pocos alimentos. Hay mentes que van brillando sobre penosos intentos, el hambre viene aflorando sin entender de lamentos. Quisiera ver esta peste alejada de mi pueblo, para que así no nos reste ni ver como a veces tiemblo. Siento lamentos en niños que viven sin alimentos, quizá reciban cariños en esos malos momentos. Esta peste maldecida que se va llevando humanos, deja la senda elegida entre muchos sueños vanos. Siempre las pestes dejaron sufrimientos inhumanos, que solo el tiempo arreglaron mientras temblaban las manos. Quisiera borrar la etapa por donde vamos pasando, y poder doblar el mapa viendo a todo el mundo andando. No tengo las soluciones, ni puedo sentirme mago, más siento las negaciones al percibir tan mal trago. Si yo tuviera la llave de arreglar este mal paso, podría lanzar la clave de borrar cualquier fracaso. Esta peste maldecida, que vino dejando estragos, quiere mostrar cierta herida haciendo caminos largos. En La Castilla Sedienta, donde se ven bien los campos, la vida a veces se inventa para evitar más los llantos. Caminos que son historia, vientos que dejan calvarios, pestes que fueron memoria sin respetar los sudarios. A veces lo ecos suenan, dicen que arrastran salarios, pero son puro venenos con gestos insolidarios. Cuando se vaya la peste y brille el verdor del campo, en ningún paisaje agreste quisiera ver un mal llanto. Castilla llena de sombras, con caminos recordados, donde mirando te asombras en los viñedos cuidados. En La Castilla Profunda entre sueños despistados, alguna peste rotunda dejo pueblos sepultados. La Perdiz maldita peste, San Martín pueblo borrado, en aquel penoso ambiente con la cal era inundado. Hoy lo tenemos presente, los años se van pasando, siempre guardara la mente lo que vamos aguantando. Cuando volvemos al ciclo de ver los virus borrados, nos sentiremos más ricos al vernos tan liberados. Todo pasa y todo queda, lo dijo Antonio Machado, hoy parece existir veda sobre el camino pisado. Volveremos a la vida de caminar encantados, llevando la frente erguida y el sabor de liberados. Esta peste maldecida cargada de sobresaltos, hoy no la vemos vencida y puede dejar sus llantos… G X Cantalapiedra. 13 – 5 – 2020.