Os oigo comentar de
escuelas de izquierdas y de derechas. Os voy a contar mi experiencia de las escuelas que me tocaron a mi en suerte.
Primero:
En un pueblo de izquierdas como es el mío, y sigue siéndolo hoy día, a mis padres y a mis abuelos nos hacían la vida imposible. Mi padre, hijo de padre de izquierdas, que no le pudo disfrutar porque la guerra se lo arrebató.
Segundo:
Nos fuimos a un pueblo de derechas donde recibí la mejor
educación del mundo mundial. Ciruelos del Pinar y Maranchón en escuelas públicas y nacionales. Y allí no se hablaba ni de derechas ni de izquierdas, sino que todos éramos una misma familia. Y los colores, para las flores; y aprender, las reglas del juego, de todos los juegos posibles que aún guardo en mi memoria. Fueron pueblos ejemplares sin duda. Si había problemas entre los padres, no nos los trasmitían a los hijos. Y los había que recuerdo dos niñas cuyos padres no se llevaban bien y ellas decían que allá sus padres que ellas eran amigas.
Mientras tanto conocía
Madrid en los inviernos en barrios de obreros y qué chapuza de
escuela. Un horror. Así que estaba deseando volver a mis pueblos de acogida y continuar allí aprendiendo.
Tercero:
Del pueblo definitivamente me despedí y fui a un
colegio Nacional, ya en toda regla. "Colegio Público García Morente" y allí había una profesora de izquierdas que nos enseñaba de forma similar a como se aprendía en los pueblos míos. Pero también nos enseñaba por su forma suya particular la
democracia en el aula. Con delegada de curso (nunca yo lo fui) y una asamblea general donde discutíamos cada tema que pasase en clase durante la semana. Una gozada de profesora, que además era muy crítica con los suyos, y nos alertaba del problema de la
corrupción que suele existir entre los de izquierdas. Tomaba como base (porque esto sucedió antes de la democracia en
España y esta profesora era criticada en el colegio pero ella enseñaba a su manera como funcionaria que era y que tenía un sentido particular de enseñar) tomaba como base como decía a los revolucionarios de América del Sur y la regla no variaba nunca. Primero protestaban contra las dictaduras y luego ellos eran mas dictadores que aquellos contra los que se sublevaban. Y el
comunismo tiene eso, que al final vuelve a haber clases sociales. Los dirigentes
copan el poder y lo transmiten entre sus familiares, hijos, etc. Y son corruptos a tope. Y ella nos lo enseñaba porque ella era crítica y lo había estudiado, vivido, visto y analizado.