DECÍAMOS QUE EN LOS AÑOS 60 ESPAÑA DESPIERTA DE SU LETARGO ECONÓMICO. Y el que no lo quiera ver es que, sencillamente: ni lo vio ni lo vivió. Y si lo vio y lo vivió y no cuenta la verdad, es que ronda por su cabeza ideas de izquierdas y nunca darán su brazo a torcer.
Los años sesenta se caracterizan por un imparable crecimiento de la economía española, favorecida por una buena coyuntura internacional. La población española creció de forma espectacular, al ritmo más elevado de toda su historia. La fuerte demanda de mano de obra en los países europeos provocó una intensa oleada de emigrantes (yo tuve billete para ir a Francia trabajando en la SIMCA, fábrica de coches, no pude ir porque no tenía el servicio militar cumplido) lo que, unido a la llegada de turistas que visitaban España cada vez en mayor número, generó una gran corriente de divisas. Las fuertes inversiones extranjeras produjeron una rápida industrialización. Se habló del MILAGRO ECONÓMICO ESPAÑOL, ya que en muy poco tiempo, España dejó de ser un país agrario y se convirtió en un país industrializado, sin olvidar la ganadería, la agricultura, la minería y la pesca. La política impuesta con el Plan de Estabilización tuvo su continuación a lo largo de los años sesenta con los llamados PLANES DE DESARROLLO. Asociada a la industrialización, se produjo una intensa urbanización de algunas zonas. Todos estos fenómenos provocaron cambios sociales importantes: aumento de la clase obrera, surgimiento de la clase media, que a su vez también un cambio cultural. La tasa de alfabetización registró un avance sustancial, mejoró el nivel educativo y la mujer se incorporó poco a poco al mercado laboral.
Los años sesenta se caracterizan por un imparable crecimiento de la economía española, favorecida por una buena coyuntura internacional. La población española creció de forma espectacular, al ritmo más elevado de toda su historia. La fuerte demanda de mano de obra en los países europeos provocó una intensa oleada de emigrantes (yo tuve billete para ir a Francia trabajando en la SIMCA, fábrica de coches, no pude ir porque no tenía el servicio militar cumplido) lo que, unido a la llegada de turistas que visitaban España cada vez en mayor número, generó una gran corriente de divisas. Las fuertes inversiones extranjeras produjeron una rápida industrialización. Se habló del MILAGRO ECONÓMICO ESPAÑOL, ya que en muy poco tiempo, España dejó de ser un país agrario y se convirtió en un país industrializado, sin olvidar la ganadería, la agricultura, la minería y la pesca. La política impuesta con el Plan de Estabilización tuvo su continuación a lo largo de los años sesenta con los llamados PLANES DE DESARROLLO. Asociada a la industrialización, se produjo una intensa urbanización de algunas zonas. Todos estos fenómenos provocaron cambios sociales importantes: aumento de la clase obrera, surgimiento de la clase media, que a su vez también un cambio cultural. La tasa de alfabetización registró un avance sustancial, mejoró el nivel educativo y la mujer se incorporó poco a poco al mercado laboral.