Después de la tempestad viene la calma....

Después de la tempestad viene la calma.

Este dicho nos enseña que no hay que desesperar cuando aparece una situación problemática o difícil. La vida enseña que los problemas siempre pasan y, finalmente, sobrevienen tiempos de tranquilidad y paz. Algunas veces, cuando no hay nada que hacer, simplemente es cuestión de esperar a que la tormenta pase.