OTRA LECCIÓN.
REGLAS PARA EL CORRECTO USO DE LOS SIGNOS DE PUNTUACIÓN.
No puede haber reglas exactas para fijar el empleo de los signos de puntuación, y especialmente de la COMA, sino unas cuantas normas para casos generales, puesto que la clase de escrito, la forma de redacción, la intención del escritor y otras causas exigen el uso circunstancial de signos que escapan a todo precepto reglado que pudiera dictarse.
Se exponen, pues, las reglas más corrientes.
USO DEL PUNTO. Punto final es el que se pone al final del escrito. ¿Recuerdan cuándo en clase hacíamos dictados? El Profe nos decía: punto final, al acabar el dictado. También nos decía el profe: Punto y aparte que se pone al hacer referencia a un asunto diferente del tratado en el párrafo anterior, o cuando se considera el mismo en otro aspecto,
Punto y seguido. Se usa cuando cuando terminamos un concepto y seguimos razonando sobre el mismo tema.
Puntos suspensivos. Se emplean cuando conviene al escritor dejar en suspenso el sentido, o cuando, por respeto, duda o temor, deja de decirse cosa fácil de comprender. También se emplean al citar palabras textuales después de mencionadas las que hacen al caso.
Notas extraídas del: CURSO SUPERIOR DE GRAMÁTICA ESPAÑOLA (Luis Miranda Podadera).
REGLAS PARA EL CORRECTO USO DE LOS SIGNOS DE PUNTUACIÓN.
No puede haber reglas exactas para fijar el empleo de los signos de puntuación, y especialmente de la COMA, sino unas cuantas normas para casos generales, puesto que la clase de escrito, la forma de redacción, la intención del escritor y otras causas exigen el uso circunstancial de signos que escapan a todo precepto reglado que pudiera dictarse.
Se exponen, pues, las reglas más corrientes.
USO DEL PUNTO. Punto final es el que se pone al final del escrito. ¿Recuerdan cuándo en clase hacíamos dictados? El Profe nos decía: punto final, al acabar el dictado. También nos decía el profe: Punto y aparte que se pone al hacer referencia a un asunto diferente del tratado en el párrafo anterior, o cuando se considera el mismo en otro aspecto,
Punto y seguido. Se usa cuando cuando terminamos un concepto y seguimos razonando sobre el mismo tema.
Puntos suspensivos. Se emplean cuando conviene al escritor dejar en suspenso el sentido, o cuando, por respeto, duda o temor, deja de decirse cosa fácil de comprender. También se emplean al citar palabras textuales después de mencionadas las que hacen al caso.
Notas extraídas del: CURSO SUPERIOR DE GRAMÁTICA ESPAÑOLA (Luis Miranda Podadera).