Que tontos nos ponemos
Cuando nos enamoramos,
Pero que tontos nos ponemos
Cuando nos damos la mano,
Si es el
hombre a la
mujer
O se dan la mano ambos,
Pero que tontos nos ponemos
Para después nos enfadarnos.
¡Por un quirate de ahí esas pajas!
Y ya “pa” siempre odiarnos.
o sea.