CUPIDO SE EQUIVOCÓ, La Poesía

CUPIDO SE EQUIVOCÓ

No quería enamorarse
y Cupido la engañó,
clavándole fuertemente
la flecha en el corazón.

Quiso arrancársela sola
pero no lo consiguió
y cuanto más lo intentaba
más grande era su dolor.

¡Cupido, te has equivocado!
le dijo con triste voz,
pero él le ha contestado,
¡yo nunca cometo error!

La flecha iba dirigida
directa a tú corazón,
aunque sé que estás herida
se calmará tú dolor.

El bálsamo que contiene
aunque parezca mentira,
hará que puedas curar
algunas viejas heridas.

Quedarán las cicatrices
pero sin ningún dolor,
pues todo queda curado
con la flecha del amor.
Pa. Sa. Ma.