LAS PRIMERAS ROSAS, La Poesía

LAS PRIMERAS ROSAS

Cuando en mis manos contemplo
esas rosas deshojadas,
que en la cajita yo guardo
como una cosa sagrada.

Vuelven a mí los recuerdos
de aquel bello mes de abril,
que con amor me ofreciste
las primeras del jardín.

Las cortaste con cuidado
por no dañar al rosal,
y pidiéndole permiso
para poderlas cortar.

Aun recuerdo las palabras
que tú al rosal le decías,
¡déjame cortar las rosas,
son para la novia mía!

Ella las tendrá cuidadas
como un preciado tesoro,
por ser un regalo mío
porque sabe que la adoro.

Me pareció que el rosal
con gusto te las cedía,
porque volvió a florecer
al cabo de pocos días.

Con unas rosas tan lindas
desprendiendo tal perfume
que a varios metros se olía
aquel olor tan sublime.
Pa. Sa. Ma.