EL PEQUEÑO PASTORCILLO, La Poesía

EL PEQUEÑO PASTORCILLO

Una moza casadera
le decía a un pastorcillo,
requiebros y galanteos
cuando era solo un chiquillo.

-Si a mi verita vinieras
te colmaría de besos,

A mi me colman las migas
y algún trocito de queso,
cuando estoy en la montaña
en lo más alto de un teso.

No me engañes con lindezas
que en amores no soy diestro,
con un beso entregó judas
a su divino maestro.

-Deja la sierra y la nieve
que en mi casa hallarás lumbre.

Soy pastor de tierras duras
y a mí me gustan las cumbres.

-No dormirás en el suelo,
que en mi casa tendrás cama.

Yo duermo con mis ovejas
en sus vellones de lana,
colchón que ya lo quisieran
tener algunas sultanas.

-Comerás el pan más blanco
de los trigos candeales.

Yo como pan de centeno
que me lo amasa mi madre,

-Con cucharita de plata
comerás manjares finos.

No necesito cuchara
“pa” un torrezno de tocino,
que tengo yo mis cubiertos
de cepa de brezo fino.

-Comprobarás la dulzura
cuando acaricies mi cara.

Tengo miel de los panales
que crecen entre las jaras,
que son manjares de reyes
pero a mí me la regalan.

-Si no puedo convencerte
regálame solo un beso.

Solo puedo regalarte
la flor de jara y romero,
y florecillas del campo
para que adornes tú pelo.

Busca en otro los amores
que yo casarme no quiero.
tengo el amor de mi perro
y él es mi fiel compañero.
pa. Sa. Ma.