EL OTOÑO DE LA VIDA
El otoño de la vida
nos llega sin darnos cuenta,
no es una etapa perdida
si la mente esta contenta.
Vivimos siempre deprisa
soñando caminos viejos,
y a veces vemos la brisa
que rompe nuestros complejos.
El otoño de la vida
aquel que vimos tan lejos,
sin ser la ruta escogida
hoy vivimos sus reflejos.
Nunca seremos los mismos
por mucho que lo busquemos,
existen ciertos abismos
donde no retrocedemos.
Cada noche nos miramos
tranquilos en el espejo,
y las canas nos peinamos
para marchar al colegio.
Somos el otoño en marcha
sin protestar y sin miedo,
no nos asusta la escarcha
ni soñamos nuevo credo.
Andamos por los caminos
soñando nuevos senderos,
entre pájaros y trinos
nos vemos aventureros.
El otoño de la vida
no quiere ser agorero,
ni ser la bala perdida
que elimine al romancero.
El otoño se presenta
con lluvias y nuevos duelos,
dicen que nunca se ausenta
cuando nos da sus consuelos.
G X Cantalapiedra.
El otoño de la vida
nos llega sin darnos cuenta,
no es una etapa perdida
si la mente esta contenta.
Vivimos siempre deprisa
soñando caminos viejos,
y a veces vemos la brisa
que rompe nuestros complejos.
El otoño de la vida
aquel que vimos tan lejos,
sin ser la ruta escogida
hoy vivimos sus reflejos.
Nunca seremos los mismos
por mucho que lo busquemos,
existen ciertos abismos
donde no retrocedemos.
Cada noche nos miramos
tranquilos en el espejo,
y las canas nos peinamos
para marchar al colegio.
Somos el otoño en marcha
sin protestar y sin miedo,
no nos asusta la escarcha
ni soñamos nuevo credo.
Andamos por los caminos
soñando nuevos senderos,
entre pájaros y trinos
nos vemos aventureros.
El otoño de la vida
no quiere ser agorero,
ni ser la bala perdida
que elimine al romancero.
El otoño se presenta
con lluvias y nuevos duelos,
dicen que nunca se ausenta
cuando nos da sus consuelos.
G X Cantalapiedra.