Madrid rectifica y permite ahora las reuniones de
amigos en domicilios durante la noche.
Sara Medialdea.
TRIANA. Ahora toca otra formalidad. Lo de la margarita: Si, no, si, no, si... Tarumba nos vuelven. Pero, ¡Qué
políticos tenemos! La reunión entre
amigos es UN BOTELLÓN MÁS. Ruidos por todas las partes. Los vecinos no podrán dormir. No atajamos el mal, al contrario, lo incrementamos.