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El PP acusa al PSOE de «connivencia» con los abogados que interrogaron a Rajoy.

«Como no pueden ganar elecciones, utilizan la justicia para atacar al Gobierno y al PP»

PALOMA CERVILLA. Madrid.

Actualizado: 27/07/2017 01:29h.

El Partido Popular respiraba ayer un poco más tranquilo, después de la comparecencia del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, como testigo en el primer juicio de la Gürtel. El objetivo era superar este difícil momento para poder irse de vacaciones y pasar una página complicada, que les permitirá iniciar el curso en septiembre con esta asignatura superada.

El entorno del presidente siempre ha sostenido que el eco de esta comparecencia durará el tiempo en el que la actualidad termine por imponerse a la imagen de Rajoy declarando ante un tribunal.

Para atenuar este impacto, el Gobierno y el PP idearon ayer una comparecencia de Mariano Rajoy con el Pacto Contra la Violencia de Género de fondo, nada más salir de la Audiencia Nacional. Hoy se publican los datos del paro, que serán buenos, y entregará las medallas al Mérito del Trabajo en el Palacio de la Moncloa, con foto incluida con Pau Gasol o María Teresa Campos, entre otros galardonados.

«Damos por zanjado el tema, y a otra cosa», aseguraba ayer un miembro de la dirección del PP, que calificaba de «positiva» la comparecencia de Rajoy.

Juicio político
Los populares pusieron ayer el énfasis en la «connivencia del PSOE» con los tres abogados que interrogaron al presidente del Gobierno, en un encuentrio informar con periodistas, después del acto de apoyo al acuerdo contra la violencia de género.

Especialmente crítico fue el coordinador general del PP, Fernando Martínez-Maíllo, con el de Adade, además de los letrados del PSOE de Valencia y Madrid. En este sentido, recordó declaraciones de responsables de Adade en apoyo del secretario general del PSOE, Pedro Sánchez.

El dirigente popular llegó a acusar a los socialistas de hacer «un juicio político» porque, «como no ganan elecciones, utilizan a la justicia para dejastar al Gobierno. Se notaba que las preguntas eran políticas». Para Martínez-Maíllo, se ha «instrumentalizado» la justicia y «han llevado la política a sede judicial». Una estrategia, dijo, que se «va a desmontar».

«Parlamento con togas»
El vicesecretario de Comunicación del PP, Pablo Casado, apostilló que el interrogatorio de los abogados que representaban a la acusación socialista forma parte de la «precampaña de Sánchez». Maíllo fue más allá y llegó a asegurar que el dirigente socialista tendrá que responder en su día sobre una condonación de 50 millones de euros al PSOE. Y recordó que los socialistas aseguraron en el Congreso que «los secretarios generales no están en el día de las cuentas» de los partidos.

Los populares llegaron a afirmar que el PSOE ha convertido al tribunal en un «Parlamento con togas», frente a la imagen de «tranquilidad y sosiego» que ha ofrecido el PP.

Finalmente, negó el «trato de favor» al presidente, ya que se le ha impedido declarar por videoconferencia, como sí se ha hecho en otras ocasiones con otros testigos,, «y se le ha preguntado de todo».