Algunos os creéis muy graciosos, pero si supiérais...

Algunos os creéis muy graciosos, pero si supiérais el porvenir que os espera vuestros cabellos se volverían blancos. Es evidente que estáis ciegos y sordos y no queréis que nadie os despierte de la modorra espiritual en la que esttáis sumidos. ¡Que Dios tenga misericordia de vuestras Almas en la adversidad que se cierne sobre vuestras cabezas!