¿Estás segura?, igual eres tú la que estás afectada...

Yo pienso que la madre o el padre que pretende crear a sus hijos en SOLITARIO, tienen una actitud sumamente egoísta al privarle de uno de los dos.

Yo al igual que Noemi, soy tremendamente "antigua" o como lo quieran llamar, me gusta la ley natural y el hijo concebido, con excepciones, por esta ley, no me gustan nada los vientres de alquiler ni los pactos de dinero para conseguir un hijo.

Ya se encarga la vida de darnos palos al respecto, es decir de quitarnos al padre o a la madre por ley natural, como para que encima provoquemos nosotros esa situación.

Aparte que tenemos que pensar que clase de Sociedad queremos, que papel tenemos destinado al hombre o a la mujer, como "maquinas" de hacer niños, no, no me gusta esa idea.

Saludos.

MARI. Todo lo relacionado con los hijos da dado un giro copernicano. Yo también me inclino por lo que conocí en mi infancia. ¿Valen las comparaciones? Dicen que son odiosas, no lo creo. Cierto que, también podíamos hablar aquí de los HOSPICIOS. Yo visité uno y había mucho niños /as recogidos por las monjitas, niños que fueron abandonados por su madre principalmente. Para adoptar necesitas cubrir muchos papeles y al mismo tiempo, valía también los informes que daban para que un matrimonio sin hijos pudiera adoptar.

Angel creo que te lías un poco con el divorcio que es cosa de cuatro dias ates solo los separaba la iglesia y era cosa de años y entonces el matrimonio no había existido, los que perdían eran siempre los niños.
En el hospicio había un torno que si la madre quería dejar al niño y no dejaba ni un nombre para el niño si ella quería dejaba toda clase de datos y las monjas le pedían que estuviera una temporada amamantando a otros niños de la misma edad muchos meses.
Esto no viene mucho al caso así que ahora escribire de lo que trata este enunciado.

Así es ELO, últimamente tu paisano no está muy acertado en lo que escribe, debe de ser el calor....

Besitos.

¿Estás segura?, igual eres tú la que estás afectada por el calor............., ¿O quién sabe que otra cosa puede ser?, o sea, ¡No empiece con malas artimañas!