EL RECUADRO....

EL RECUADRO.

Iglesias el humilde.

Se ha pedido ser vicepresidente del Gobierno. ¡Qué modestia, teniendo 42 diputados pedir sólo la Vicepresidencia!

Antonio Burgos.

Actualizado:

21/07/2019 06:33h.

No sabía yo bien hasta ahora lo humilde, pero humildísimo, que es Pablo Iglesias, el de Podemas Unidos, que es más bien Podemenos Unidos, a la vista de cómo, a la hora en que escribo al menos, se están desarrollando las negociaciones de la investidura, investidurísima, de Sánchez. Que si fueran hombres de fe y las investiduras tuvieran Patrón, de la que está programada para mañana lunes día 22 debería ser San Ramón Nonato. Dicho con otras palabras: si sale con barbas será San Antón y, si no, la Purísima Concepción.

Pero íbamos con la humildad de Iglesias. Pudiendo ser Duque de Galapagar con Grandeza de España, se conforma con ser Marqués, de los que vienen siete mil en el Elenco de Títulos del Reino. Y pudiendo tener un pedazo de chalé en La Finca, como todo futbolista o artista defraudador de Hacienda que se precie, se conforma con un simple casoplón en Galapagar, con lo lejos y lo mal comunicada por transporte público que está Galapagar.

Toda esta civil virtud de la humildad de Iglesias se está viendo en estas horas en las que está al caer, como si fuera una llegada de la Vuelta a Francia, la «foto finish» de los apoyos a Sánchez como presidente de verdad y no como ahora, que todavía no es presidente, pero como si lo fuera, de cómo estando en funciones gasta el dinero, de cómo entrampa al Reino de España con sus caprichos, de cómo está todo el santo día con el que-voy-que-vengo del Falcon. Iglesias, en sus dudas de la investidura, se ha pedido ser vicepresidente del Gobierno. ¡Qué modestia, teniendo una mierda de 42 diputados pedirse solamente la Vicepresidencia del Gobierno! Yo que él, con ese respaldo frente a los 123 diputados de Sánchez, me pedía por lo menos ser, además de presidente del Gobierne, presidente del Real Madrid para hacer la limpia de plantilla y sacar un dinero

¿Y los ministerios? Qué lástima de hijos los poquísimos ministerios que pide con esa proverbial modestia. ¿Cómo es posible que se limite a pedir la Vicepresidencia del Gobierno y los ministerios de Hacienda, Teabajo, Comunicaciones y Seguridad Social, o algo así de modesto y de poco ambicioso? ¿Para eso hicimos una guerra? Perdón, que me he equivocado, que esta frase es de otra novela. ¿Para esto llenamos la Puerta del Sol de tiendas de Quechua un 15-M, para ahora apenas pedir nada o casi nada de Ministerios? Le falta empuje y, sobre todo, cara para pedir. No lo ha hecho la boca de un fraile. Podía haber pedido no solamente ministerios existentes, sino inventados. ¿Por qué no pedir el Ministerio de Contar Nubes, que queda como muy lírico y muy del anterior presidente del Gobierno? ¿Por qué no pedir el Ministerio de las Puestas de Sol, para ordenar las de todas las costas de España? Aquello antiguo de «ministtro, aunque sea de Marina», como ya no hay tal departamento dedicado exclusivamente a la gloriosa Armada, a la honra con barcos y a los barcos sin honra, podía perfectamente quedar sustituido por el Ministerio de las Puestas de Sol. ¿Y el Ministerio de las Cabañuelas, por qué no, superación y puesta en tradición española de la Agencia Estatal de Meteorología?

Pero algo me extraña más todavía. Que no haya pedido no digo ya un Ministerio, sino una simple Secretaría de Estado o una Dirección General para Alberto Rodríguez, el Hombre de las Rastas, el que sustituyó Pablo Echenique cuando cogió su carricoche y se fue con la competencia. Igual que vacaciones sin Kodak eran vacaciones perdidas, Ministerio sin Titular con Rastas es Gobierno perdido. Entre otras cosas, para tranquilidad de Celia Villalobos y su champú anti-piojos. Si no hay investidura y ni hay ministro con rastas, ni esto es un Gobierno de Progreso ni esto es nada.

Antonio Burgos.

Articulista de Opinión.
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
MUY BUENO EL ARTÍCULO DE ANTONIO BURGOS. Sencillo, lúcido y transparente.

Un saludo, Triana.