La semana negra de Mónica García: los riesgos de pasarse de frenada.
OKDIARIO.
ACTUALIZADO: 18/03/2023 09:15.
Menuda semanita la de la líder de Más Madrid, Mónica García, que además de quedar retratada como una auténtica hipócrita por pedir la destitución del vicepresidente madrileño, Enrique Ossorio, por beneficiarse del bono social eléctrico del que también se está beneficiando ella, echa a estas horas espumarajos por la boca al comprobar que los médicos han llegado a un acuerdo con la Comunidad de Madrid y han puesto fin a la huelga. En dos días, Mónica García ha sufrido dos reveses de esos que te dejan tirada en la lona. La médico y madre, una vez pillada con el bono en la mano, prometió renunciar a las ayudas, pero dejó pasar el plazo que tenía para darse de baja a través de un sencillo trámite en internet. No lo hizo y ahora no tiene ningún cauce para devolver ese dinero destinado a «paliar la pobreza energética en consumidores vulnerables, en lo que respecta a energía destinada a calefacción, agua caliente sanitaria o cocina».
Los beneficiarios, tal y como consta en la página web de la consejería madrileña, «pueden renunciar a la percepción de la ayuda o comunicar nuevos datos bancarios para el ingreso de la ayuda». Y es que en la web de la consejería se van publicando el listado de beneficiarios de este bono social térmico que reciben automáticamente las personas que tienen el descuento del bono social eléctrico, este sí, pedido expresamente. Junto con la publicación del listado de beneficiarios se publica la posibilidad, durante 15 días, de renunciar a este beneficio rellenando un sencillo formulario. Mónica García no lo hizo, por lo que, una vez pillada, sus palabras son toda una oda al cinismo.
Por si fuera poco, los médicos de atención primaria han desconvocado la huelga y dejado sin argumentos a la líder de Más Madrid, a la que no le ha gustado nada que se haya alcanzado el consenso. Natural, pues era su principal baza contra Isabel Díaz Ayuso y el mejor instrumento para echarse a la calle. La semana de Mónica García ha terminado fundida en negro. Y es que el ímpetu populista de la líder de Más Madrid la ha llevado a pasarse de frenada. Y es que hay bonos que los carga el diablo.
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ACTUALIZADO: 18/03/2023 09:15.
Menuda semanita la de la líder de Más Madrid, Mónica García, que además de quedar retratada como una auténtica hipócrita por pedir la destitución del vicepresidente madrileño, Enrique Ossorio, por beneficiarse del bono social eléctrico del que también se está beneficiando ella, echa a estas horas espumarajos por la boca al comprobar que los médicos han llegado a un acuerdo con la Comunidad de Madrid y han puesto fin a la huelga. En dos días, Mónica García ha sufrido dos reveses de esos que te dejan tirada en la lona. La médico y madre, una vez pillada con el bono en la mano, prometió renunciar a las ayudas, pero dejó pasar el plazo que tenía para darse de baja a través de un sencillo trámite en internet. No lo hizo y ahora no tiene ningún cauce para devolver ese dinero destinado a «paliar la pobreza energética en consumidores vulnerables, en lo que respecta a energía destinada a calefacción, agua caliente sanitaria o cocina».
Los beneficiarios, tal y como consta en la página web de la consejería madrileña, «pueden renunciar a la percepción de la ayuda o comunicar nuevos datos bancarios para el ingreso de la ayuda». Y es que en la web de la consejería se van publicando el listado de beneficiarios de este bono social térmico que reciben automáticamente las personas que tienen el descuento del bono social eléctrico, este sí, pedido expresamente. Junto con la publicación del listado de beneficiarios se publica la posibilidad, durante 15 días, de renunciar a este beneficio rellenando un sencillo formulario. Mónica García no lo hizo, por lo que, una vez pillada, sus palabras son toda una oda al cinismo.
Por si fuera poco, los médicos de atención primaria han desconvocado la huelga y dejado sin argumentos a la líder de Más Madrid, a la que no le ha gustado nada que se haya alcanzado el consenso. Natural, pues era su principal baza contra Isabel Díaz Ayuso y el mejor instrumento para echarse a la calle. La semana de Mónica García ha terminado fundida en negro. Y es que el ímpetu populista de la líder de Más Madrid la ha llevado a pasarse de frenada. Y es que hay bonos que los carga el diablo.