Sánchez ya tiene excusa: la culpa es de Tezanos....

Sánchez ya tiene excusa: la culpa es de Tezanos.

OKDIARIO.

ACTUALIZADO: 03/06/2023 09:30.

Esta gente se supera cada día en desvergüenza. Lo que faltaba ahora es que el socialismo critique la estrategia del presidente del CIS, José Félix Tezanos, porque infla los datos del PSOE y eso nos lleva al «autoengaño». O sea, reconocen que las encuestas del Centro de Investigaciones Sociológicas están manipuladas a su favor, pero que eso, en lugar de ayudarles, se ha convertido en un problema porque les lleva a confiarse. Tiene guasa la cosa: el Gobierno sugiere que Tezanos, con dinero público, utiliza el CIS al servicio de su partido (es militante socialista) y, en el colmo de la hipocresía, se considera víctima de los sondeos del organismo público. A estas alturas, en cualquier democracia mínimamente aseada Tezanos habría sido juzgado por malversación. Lo que ya es de aurora boreal es que hasta los socialistas cuestionen ahora a quien, desde que tomó posesión de su cargo, no ha hecho otra cosa que manipular las encuestas en beneficio de Pedro Sánchez. Lo de Moncloa suena a excusa y más parece que lo que se pretende ahora es cargar las culpas del fracaso electoral en Tezanos para eludir la responsabilidad de Pedro Sánchez. Como si en Moncloa no manejaran otras encuestas que las del CIS.

Tezanos ha sumido al CIS en el más absoluto de los ridículos -sus últimos pronósticos sobre el resultado de las elecciones del pasado domingo han vuelto a fallar más que una escopeta de feria- y sus sondeos provocan carcajadas. Tezanos ha laminado todo su prestigio como sociólogo al venderse de forma bochornosa a Pedro Sánchez y Pedro Sánchez es un truhán que ahora lanza la especie de que la primera víctima de las manipulaciones del CIS es él.

La precampaña socialista ha empezado de forma surrealista: acusando a PP y Vox de estar urdiendo un plan antidemocrático en el caso de que Sánchez gane las elecciones y reprochando a José Felix Tezanos de que infle los datos del PSOE porque se confían. Están de los nervios y su grado de impotencia es tal que da miedo imaginarse hasta dónde están dispuestos a llegar. Quedan más de 50 días y veremos cosas que ni siquiera cabe imaginar.