"Los dineros" no tienen cabeza ni piernas, y quienes los mueven no apolíticos.
Quien no tiene poco o nada puede dar, quienes tienen son los retraídos.
Quien no tiene poco o nada puede dar, quienes tienen son los retraídos.
A veces quien no tiene es porque se lo ha gastado, o peor aún, lo ha derrochado.