Pedro Sánchez alienta con su silencio el ataque de sus socios a Felipe González.
Podemos abre una nueva brecha en el Gobierno al apoyar la propuesta de ERC, PNV, Bildu, JpC, BNG y CUP de investigar al expresidente por los GAL.
El voto en contra del PP impedirá la puesta en marcha de una iniciativa que enlaza con el ataque a la Transición y a la Monarquía.
MADRID. Actualizado: 23/06/2020 08:37h.
Lo que no vio venir el PSOE durante la pandemia es que sería el Partido Popular quien, por criterios y circunstancias políticas, le libraría de tener que enfrentarse en el Congreso a una comisión de investigación sobre el expresidente del Gobierno Felipe González y su presunta vinculación a la trama de los GAL (Grupos Antiterroristas de Liberación).
Las incógnitas que rodean esa etapa del «viejo» PSOE, y que inevitablemente salpican al «nuevo», brotan cada cierto tiempo como quien no es capaz de arrancar de raíz una hierba mala. En esta ocasión, el momento podría haber sido el más lacerante para un Gobierno que afronta una crisis, sobre todo, porque la iniciativa parte de sus socios.
Pero será el PP -con quién Pedro Sánchez no quiere negociar nada- quién sume fuerzas con los socialistas por «sentido de Estado» para tumbar una comisión que entronca con los ataques a la Transición y a la Monarquía.
Podemos abre una nueva brecha en el Gobierno al apoyar la propuesta de ERC, PNV, Bildu, JpC, BNG y CUP de investigar al expresidente por los GAL.
El voto en contra del PP impedirá la puesta en marcha de una iniciativa que enlaza con el ataque a la Transición y a la Monarquía.
MADRID. Actualizado: 23/06/2020 08:37h.
Lo que no vio venir el PSOE durante la pandemia es que sería el Partido Popular quien, por criterios y circunstancias políticas, le libraría de tener que enfrentarse en el Congreso a una comisión de investigación sobre el expresidente del Gobierno Felipe González y su presunta vinculación a la trama de los GAL (Grupos Antiterroristas de Liberación).
Las incógnitas que rodean esa etapa del «viejo» PSOE, y que inevitablemente salpican al «nuevo», brotan cada cierto tiempo como quien no es capaz de arrancar de raíz una hierba mala. En esta ocasión, el momento podría haber sido el más lacerante para un Gobierno que afronta una crisis, sobre todo, porque la iniciativa parte de sus socios.
Pero será el PP -con quién Pedro Sánchez no quiere negociar nada- quién sume fuerzas con los socialistas por «sentido de Estado» para tumbar una comisión que entronca con los ataques a la Transición y a la Monarquía.