Mientras MEDIO PAIS (trabajadores) tengan que mantener al otro MEDIO (parados, excluidos sociales etc) esto se irá a pique gracias a la política socialcomunista. Carlos
Bueno...
Yo no le echaría la culpa sólo a la política socialcomunista.
Resulta que en nuestra querida España, esa España mía, esa España nuestra, no hay títere que no moje.
En cuanto se tiene la ocasión, ¡ZAS|, allá que vamos con la sopa (para mojar).
A la altura que estamos, y visto lo visto de lo que ha sucedido a lo largo de más de 40 años de constitucionalismo.
¡Ojo!, digo constitucionalismo, NO democracia, no se puede sostener que la culpa venga sólo del social-comunismo actual.
Durante el periplo de muchos gobernantes de centro-derecha y social-democracia ha ocurrido lo mismo o peor, y estoy pensando en Juan Guerra, Jordi Pujol y Cía, M. Boyer, C. Cifuentes, etc, etc, etc.
Si en España hay una economía sumergida del 20% del PIB la culpa no es de otros, sino de los españoles.
Aquí, prácticamente todo el que tiene la ocasión, mete la mano.
Deberíamos de preocuparnos seriamente en enseñar a nuestros hijos a cumplir las leyes y no a burlarse de ellas, porque, de lo contrario, ¿para qué nos sirven?
Saludos.
Yo no le echaría la culpa sólo a la política socialcomunista.
Resulta que en nuestra querida España, esa España mía, esa España nuestra, no hay títere que no moje.
En cuanto se tiene la ocasión, ¡ZAS|, allá que vamos con la sopa (para mojar).
A la altura que estamos, y visto lo visto de lo que ha sucedido a lo largo de más de 40 años de constitucionalismo.
¡Ojo!, digo constitucionalismo, NO democracia, no se puede sostener que la culpa venga sólo del social-comunismo actual.
Durante el periplo de muchos gobernantes de centro-derecha y social-democracia ha ocurrido lo mismo o peor, y estoy pensando en Juan Guerra, Jordi Pujol y Cía, M. Boyer, C. Cifuentes, etc, etc, etc.
Si en España hay una economía sumergida del 20% del PIB la culpa no es de otros, sino de los españoles.
Aquí, prácticamente todo el que tiene la ocasión, mete la mano.
Deberíamos de preocuparnos seriamente en enseñar a nuestros hijos a cumplir las leyes y no a burlarse de ellas, porque, de lo contrario, ¿para qué nos sirven?
Saludos.