El tiempo y las circunstancias son mis enemigos, te...

ángel.- Hay trabajos de todo tipo y color sobre el tema
Uno de ellos de Antonio Marquina Dice en su Introducción

La estrecha relación político-militar entre España y Estados Unidos, como en buena parte de
los estados de Europa Occidental, tiene como punto de partida fundante la segunda guerra
mundial. Sin embargo esta relación tiene unas características específicas. España, como
consecuencia de la guerra civil, soportó y fomentó la presencia e influencia extraordinaria de
los estados del Eje y de los partidos nazi y fascistas. España, una vez que comienza la guerra
mundial se declara neutral, para pasar a ser no-beligerante y para, finalmente, perder la
neutralidad al convertirse secretamente en un estado del Eje con la adhesión al Pacto de Acero
(punto tercero del protocolo de Hendaya —Véase recuadro) 3
. Las consecuencias serán de
extrema gravedad para la proyección internacional de España y el bienestar y las libertades de
los españoles.

Llamada.-En este año de 2003 se ha producido la muerte de uno de los protagonistas de la sumisión de España a los
dictados de Eje, Ramón Serrano Suñer, quien, en vano, trató de reescribir la historia y su propia biografía. Creo
que está en nuestro haber el haber demostrado por primera vez la adhesión de España al Pacto de Acero, como
punto cardinal de la reorientación político-militar española y su graves consecuencias posteriores.
Lamentablemente, la propaganda todavía perdura, incluso a nivel oficial, como pudimos comprobar en la
Comisión Nacional para el estudio de las transacciones de oro del Tercer Reich, sobre cuyos resultados los
investigadores tendrán que volver en algún momento.

OLIMPIO. Nada que objetar. Me parece muy bien lo que cuentas. Que por cierto es más o menos lo que todos sabemos.

El tiempo y las circunstancias son mis enemigos, te hablaré de todo. Si hay documentos, no todos, faltan algunos secretos de estado

Sectores habla
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
OLIMPIO. Todo lo que se diga de un bando o del otro, lo sabemos en casi su totalidad. Otra cosa es quien lo cuenta arrimando su rescoldo a su favor. Por eso digo que hay que decir la verdad o mentira de los dos bandos.