VALOR CULINARIO DEL ORÉGANO
Si empecé a cultivarlo no fue por su valor terapéutico ya que nunca he tomado ni una taza de infusión de este producto. Sino por lo que aporta en la cocina.
Se puede usar para matanzas, adobo de carnes, principalmente. En el pescado no lo he utilizado nunca.
En la salsa de tomate una pizca, le va estupendamente. Y en el gazpacho también. Además, al gazpacho le echo cominos que evitan la flatulencia y no se nota ni que lo tiene si no lo dices.
En la cocina he aprendido que hay que guardar secretos porque sino te arruinan un plato. En cuanto dices lleva esto o lo otro, siempre hay algún aprensiv@ que a poco que te descuides te desprestigia el guiso.
Le va muy bien al adobo del lomo de cerdo y es sencillo: ajos, pimentón, orégano a discreción y bastante sal. Por poner un ejemplo. Pero al pollo también le va estupendamente.
Eso si, cada un@ tendrá que valorar las cantidades adaptadas a las necesidades propias o de los demás. No pasarse con el orégano ni en la cocina o pasarse si interesa. Eso al gusto del consumidor/a. Sobre gustos y necesidades no hay nada escrito.
La primera vez que vi esas flores de orégano las corté y me las puse en un jarrón en mi habitación.
- ¡Mira tía que bonitas!
- ¿Has cortado el orégano de la matanza? No me lo puedo creer.
-Pues lo siento que no lo sabía pero me gustaron las flores y pensaba que solo eran eso, flores.
Menudo expolio que me montaron y cuántas caras largas.
Si me lo hubieran dicho, conociendo que cortaba todas las flores que veía, por insignificantes que fueran, se habrían ahorrado el corte de flor temprana. Porque en la
foto se ve rosa pero cuando hay que cortarlo es cuando pierde la flor y se queda verde. Hojitas muy pequeñas verdes. Pero si las dejas, vuelven al rojo de nuevo pero se pueden coger ya.