Pues vamos allá, a ver qué es eso....

Pues vamos allá, a ver qué es eso.

Por Antonio Burgos:

Eran los años triunfales del PSOE de González, cuando todo el mundo se apuntaba a caballo ganador, y yo le dediqué un artículo que titulé "Tu quoque, Curro?". Entonces, ciertamente, había que echarle valor a dar la cara por un partido siendo torero. Pero ahora es que vienen a buscarte. Con lleno hasta la bandera de toreros van a estar algunas listas. O de "aficionados prácticos", como siempre se han llamado, cual el caso de mi admirado Adolfo Suárez Illana, con quien más de acuerdo no puedo estar en lo que ha dicho sobre el aborto, como piensa gran parte de la derecha, de la que otra vez anda renegendo el PP, en Modo Rajoy. Con el PP va Suárez Illana de aficionado práctico y va Miguel Abellán de luces. Y Salvador Vega va por Málaga. Y en Sevilla, capital del Planeta de los Toros que decía Cañabate, el PP ha reunido como amparadores a Raúl Gracia "El Tato", a Ruiz Miguel, a Borja Domecq, a Pepe Luis Vargas y a José Luis Moreno. Serafín Marín, el solitario luchador contra la prohibición de los toros en Cataluña, el que hizo el último paseíllo en la Monumental de Barcelona con una barretina por montera, va en las listas de Vox. Óle la casta torera. A quien no veo que se esté pegando ningún arrimón con el mundo del toro es a Ciudadanos. Será para así tener las manos limpias para poder pactar, si se tercia, con los abolicionistas de la Tauromaquia, que en Ciudadanos sí que "hay gente pá tó" lo que vaya haciendo falta. Así que más toreras las listas no pueden ser. Vamos, que lo único que falta ya es que los elegidos no salgan de las urnas, sino del bombo de San Isidro de Simón Casas. Lo malo es que me estoy viendo a Andrés Amorós de cronista parlamentario.