Os pasa como al perro del hortelano que ni come ni deja, ¡madre que tropa!
No cambia. Razones, es lo que le faltan, razones y datos.
A paseo y luego me cuenta como van las obras, ¡otro que quiere subirse al carro!
Mira Triana: Te recuerdo qye en La Rioja el 99% està exento.
NO A LA DEMAGOGIA y sí al pago de los ricos, que entorpecen el progreso de los pobres.
Copi-pega
Hace 10 años rehusar al legado era testimonial, ahora cada vez más riojanos dicen no a recibir unos activos 'envenenados' con importantes deudas
CARMEN NEVOT CNEVOT@DIARIOLARIOJA. COM
Logroño.
Las herencias se convierten en ocasiones en un regalo envenenado. Detrás de los inmuebles y el capital (activos) están las deudas, los impagos (pasivos) y cuando se acepta el legado ya no hay vuelta atrás. Se da el consentimiento para lo bueno, pero también para lo malo.
Heredar no sólo es extender la mano para recoger, en cada vez más ocasiones consiste en estirar el brazo para dar, para saldar deudas que el finado tenía aparentemente ocultas a sus descendientes. Precisamente, con la crisis han aumentado los números rojos que pasan de generación y generación y, para no tener que hacer frente a ellos, cada vez más riojanos rehusan recibir la no tan suntuosa herencia.
Las cifras que arroja el centro de información estadística del Consejo General del Notariado así lo evidencian. Un ejemplo: en el primer semestre del 2007, los notarios riojanos formalizaron 57 renuncias a herencias y de enero a junio de este año se contabilizaron 145.
A año completo la progresión ascendente es más que evidente. En todo el 2007 se registraron 103 renuncias, mientras que en los doce meses del 2012, 306 personas rechazaron recibir la herencia.
En las notarías riojanas el efecto es más que palpable. Tomás Sobrino, decano de los notarios de la región, reconoce que una década atrás las renuncias eran testimoniales y ahora, aunque no son el pan de cada día, sí son un trámite más que conocido en el sector al que los supuestos legatarios recurren cuando el pasivo supera al activo.
Porcentualmente, La Rioja lidera, con el 197%, el incremento de renuncias en el conjunto del país. Le siguen Murcia (178%), que también ha registrado un notable aumento, Baleares (145), Andalucía (143) y Galicia (137). A la cola se sitúan el País Vasco, con un incremento del 47%, y Navarra (42%), que cierra la lista.
Rehusar a la herencia es una de las vías existentes para detener el paso de la deuda, pero existen otras, como la aceptación a beneficio de inventario. ¿Qué significa? «Yo acepto la herencia pero sólo pago las deudas hasta donde alcancen los bienes». Así explica el representante de los notarios riojanos en qué consiste una fórmula que «se utiliza poco». Normalmente, los beneficiarios optan por desentenderse del legado completo. Entienden que así es «más fácil y más práctico para ellos», comenta, aunque si el que renuncia tiene un hijo menor de edad, éste también deberá renunciar y para ello será necesario solicitar autorización al juez. En este supuesto, la burocracia ralentizará un proceso que, a priori, podía parecer rápido.
Saludis
NO A LA DEMAGOGIA y sí al pago de los ricos, que entorpecen el progreso de los pobres.
Copi-pega
Hace 10 años rehusar al legado era testimonial, ahora cada vez más riojanos dicen no a recibir unos activos 'envenenados' con importantes deudas
CARMEN NEVOT CNEVOT@DIARIOLARIOJA. COM
Logroño.
Las herencias se convierten en ocasiones en un regalo envenenado. Detrás de los inmuebles y el capital (activos) están las deudas, los impagos (pasivos) y cuando se acepta el legado ya no hay vuelta atrás. Se da el consentimiento para lo bueno, pero también para lo malo.
Heredar no sólo es extender la mano para recoger, en cada vez más ocasiones consiste en estirar el brazo para dar, para saldar deudas que el finado tenía aparentemente ocultas a sus descendientes. Precisamente, con la crisis han aumentado los números rojos que pasan de generación y generación y, para no tener que hacer frente a ellos, cada vez más riojanos rehusan recibir la no tan suntuosa herencia.
Las cifras que arroja el centro de información estadística del Consejo General del Notariado así lo evidencian. Un ejemplo: en el primer semestre del 2007, los notarios riojanos formalizaron 57 renuncias a herencias y de enero a junio de este año se contabilizaron 145.
A año completo la progresión ascendente es más que evidente. En todo el 2007 se registraron 103 renuncias, mientras que en los doce meses del 2012, 306 personas rechazaron recibir la herencia.
En las notarías riojanas el efecto es más que palpable. Tomás Sobrino, decano de los notarios de la región, reconoce que una década atrás las renuncias eran testimoniales y ahora, aunque no son el pan de cada día, sí son un trámite más que conocido en el sector al que los supuestos legatarios recurren cuando el pasivo supera al activo.
Porcentualmente, La Rioja lidera, con el 197%, el incremento de renuncias en el conjunto del país. Le siguen Murcia (178%), que también ha registrado un notable aumento, Baleares (145), Andalucía (143) y Galicia (137). A la cola se sitúan el País Vasco, con un incremento del 47%, y Navarra (42%), que cierra la lista.
Rehusar a la herencia es una de las vías existentes para detener el paso de la deuda, pero existen otras, como la aceptación a beneficio de inventario. ¿Qué significa? «Yo acepto la herencia pero sólo pago las deudas hasta donde alcancen los bienes». Así explica el representante de los notarios riojanos en qué consiste una fórmula que «se utiliza poco». Normalmente, los beneficiarios optan por desentenderse del legado completo. Entienden que así es «más fácil y más práctico para ellos», comenta, aunque si el que renuncia tiene un hijo menor de edad, éste también deberá renunciar y para ello será necesario solicitar autorización al juez. En este supuesto, la burocracia ralentizará un proceso que, a priori, podía parecer rápido.
Saludis