TRIANA. Yo creo que el Rey estuvo en su sitio, bien...

Halagos al Rey en 'La Vanguardia': "Estuvo más cerca de Pedro Sánchez que de los truenos del PP y Cs”.

El mensaje del Rey, sometido al minucioso examen de todos los años.

Pilar Díez. 2018-12-26.

El Mundo dice que "el PSOE usa el discurso del Rey para avalar su política en Cataluña". Normal, se supone que lo supervisó Pedro Sánchez. Rosell defiende al Rey a capa y espada y considera que "se trata de un mensaje que suscita un amplísimo grado de aceptación en la sociedad española y en la clase política, pero como no podía ser de otro modo también genera incomodidad entre los enemigos de nuestra convivencia", que hubieran criticado al Rey dijera lo que dijera. El editorial critica que "desde Moncloa se apuntara a señalar la sintonía del Gobierno con las palabras del Rey, lo que supone un ejercicio de afinidad selectiva cuando no de cinismo: el Rey apeló al consenso dentro de la Constitución, pero Pedro Sánchez viene de firmar con Torra un comunicado que omite deliberadamente la referencia a la Carta Magna". Lo cierto es que el Rey lo tenía jodido para contentar a todo el mundo. Raúl del Pozo se ha enterado del mensajito que le envió el presidente a Torra. "Éstas son las dos opciones, o al Gobierno le apoya los Presupuestos la mayoría de la moción de censura o tendré que adelantar las elecciones con el peligro, para nosotros y vosotros, de una mayoría de derecha dura con Vox dentro". Buena jugada, falta por ver si funcionó. No hay que olvidar que Torra es el padre de los CDR, y a esos les va la marcha. Dice Raúl del Pozo que a Sánchez solo le obsesiona permanecer en Moncloa. "Está dispuesto a soportar linchamientos mediáticos, lapidaciones de las redes sociales y las catilinarias de la derecha. Aguantará en Moncloa aunque se hunda el PSOE". Perdamos toda esperanza, Sánchez mantendrá secuestradas las urnas el tiempo que le dé la gana.

El País dice que "Torra rechaza la llamada del discurso del Rey a la convivencia". Ya ves tú, qué novedad, hablar con esa gente de convivencia es como razonar con una pared. A El País le llamaron la atención "las apelaciones a la búsqueda del entendimiento y la necesidad de huir del rencor y el resentimiento. Es un mensaje imprescindible dada una coyuntura marcada por la polarización y el disenso sobre las cuestiones políticas fundamentales, y el ensañamiento con el que las fuerzas políticas manifiestan sus diferencias". ¿Solo las fuerzas políticas? Porque Milagros Pérez Oliva hace un ejercicio de concordia acusando a PP y Cs de "echar gasolina al conflicto catalán" el 21D y de llevarse un chasco por la tranquilidad y normalidad con que se desarrolló todo, con cargas policiales, enfrentamientos entre los manifestantes, cortes de carreteras, en fin, lo normal en Cataluña desde hace tiempo. Los "incendiarios" PP y Cs "no estaban preparados" para tanta normalidad y civismo y "actuaron como si se hubiera producido la catástrofe que habían anunciado. Los lideres del PP, Cs y Vox hablaron de traición, humillación y secuestro", dice Pérez Oliva haciendo un corte de mangas al buen rollito que pregona el editorial. "Pero lo que cuenta es que se han abierto cauces de diálogo y el Gobierno tiene más posibilidades de aprobar sus presupuestos. En resumen: que cuando Casado y Rivera despertaron el 22D, Sánchez seguía ahí". ¡Ah!, que aquí de lo que trata es de que Sánchez permanezca en Moncloa como sea. Haber empezado por ahí.

ABC dice que "Torra desprecia la operación diálogo de Sánchez". "Condiciona su apoyo a los presupuestos a que el ejecutivo acepte una lista de 21 demandas, incluida la autodeterminación". Y vuelta la burra al trigo, no salimos del círculo. El espíritu navideño ha hecho mella en el ánimo de Bieito Rubido, que dice que "una cosa es que Sánchez necesite los votos del separatismo catalán y otra muy distinta que se muestre dispuesto a venderse en contra de los intereses de todos los españoles y de su propio partido". ¿Pondrías la mano en el fuego, Rubido?

La Razón abre su portada con que "Vox y Podemos comparten un 20% de sus programas". Y para demostrar que su teoría es irrefutable ilustra la información con una foto de Abascal con un caballo y otra de Iglesias con sus perritos. Ambos son animales, ambos tienen cuatro patas, cola y rabo, que viene a ser lo mismo, mamíferos. Vamos, que el 80% que falta es que el caballo relincha y el perro ladra. El periódico también ha descubierto una "cumbre secreta en Jerez: Marín negocia la Mesa con Podemos pero niega a Vox". ¿A quién se le ocurre celebrar una cumbre secreta en una estación de tren en plena Navidad? Sobre el mensaje del Rey, dice Marhuenda que "como no podía ser de otra forma, mientras las principales formaciones políticas españolas, incluido un reticente Podemos, acogieron positivamente el llamamiento de Su Majestad a mantener la convivencia entre todos los ciudadanos, como el gran valor constitucional, los partidos nacionalistas reaccionario agriamente". Los partidos nacionalistas reaccionan agriamente a todo, está en su ADN. Y eso que, como comenta Abel Hernandez, "ha esquivado, como no podía ser de otro modo, el problema catalán" para no echar leña al fuego. "Este año le tocaba tratarlo por elevación para no suscitar más enfrentamientos y desgarros, aún con el riesgo de que se le acuse de caer en obviedades y no contentar a nadie". Es que el hombre tiene un problemón de los gordos.

La Vanguardia dice que "el Rey reivindica un pacto en favor de la convivencia". Fernando Ónega alaba el tono "conciliador" del mensaje, que "no tiene nada que ver con el del 3 de octubre, en el que actuó como jefe del Estado al que solo faltaba uniforme de capitán general. Ahora se puso más en rey de todos los españoles, con un lenguaje buenista, incluso dulzón. Podría ser el sermón real de las siente palabras: reconciliación, concordia, diálogo, entendimiento, integración, solidaridad, convivencia. Si esto no estaba pensado para Catalunya, que venga Dios y lo vea. Y si esto, incluido el tono, no está más cerca de la estrategia de Pedro Sánchez que de los truenos del PP y Ciudadanos, que venga Dios y lo vea también". "A Felipe se le nota la preocupación". Razones no le faltan, menudo marronazo le ha caído encima sin comerlo ni beberlo. Haga lo que haga le criticarán unos o le criticarán otros. En lugar de win-win, a él le toca lose-lose.

TRIANA. Yo creo que el Rey estuvo en su sitio, bien colocado con un discurso breve, pero eficaz.
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
Ángel, pienso que efectivamente así fue, ocurre que siempre es difícil gustar a todos y sobre todo a Torra y compañía, bueno a este gente ya sabemos todos lo que les gustaría escuchar.

Un saludo.