La volatilidad es la protagonista indiscutible en las bolsas y, ante esto, poco se puede hacer. Se pueden dar noticias y explicar las idas y venidas de los índices en función de éstas, pero lo cierto y verdad es que, tal y como están las cosas actualmente, la mayoría de lo que sucede no tiene explicación más allá de que los nervios están a flor de piel y el sinsentido en los mercados, también. Tras las subidas de la pasada jornada, hoy tocan de nuevo caídas (Ibex: -1,3%). Esta lleva siendo la tónica en los últimos tiempos. Hoy subimos fuerte, mañana caemos fuerte. Eso sí, el optimismo parece que quiere abrirse paso.