ANÁLISIS IBEX-35
Bajo el punto de vista técnico, el selectivo de la bolsa española, no mueve ficha y se mantiene impertérrito entre la zona de soporte coincidente con los 9.100 puntos por abajo y los 9.300 en su parte más alta. Y llevamos así desde principios del pasado mes de marzo donde el Ibex ni va ni viene. Ni supera resistencias ni cae a niveles relevantes como serían los 8.900 puntos que permitirían la incorporación de algunos activos a nuestras carteras, aunque sea para buscar un pequeño rebote técnico, pero esto no se produce, y la lateralidad actual está terminando por aburrir al pequeño inversor, prueba de ello la tenemos en la reducción sensible del volumen de negociación correspondiente al mes en el que estamos que se asemeja más a un mes de agosto que al actual.
Todo ello, terminaría con una superación de la barrera de los 9.400 y posteriormente los 9.600 enteros que darían otro aspecto al Ibex español, pero mientras no ocurra, no hay nada más que rascar en este índice a menos que sea en contados valores que tendremos que saber muy bien elegir si no queremos vernos arrastrados por el ímpetu vendedor y presión bajista que se ceba en los índices europeos en estos momentos.
Bajo el punto de vista técnico, el selectivo de la bolsa española, no mueve ficha y se mantiene impertérrito entre la zona de soporte coincidente con los 9.100 puntos por abajo y los 9.300 en su parte más alta. Y llevamos así desde principios del pasado mes de marzo donde el Ibex ni va ni viene. Ni supera resistencias ni cae a niveles relevantes como serían los 8.900 puntos que permitirían la incorporación de algunos activos a nuestras carteras, aunque sea para buscar un pequeño rebote técnico, pero esto no se produce, y la lateralidad actual está terminando por aburrir al pequeño inversor, prueba de ello la tenemos en la reducción sensible del volumen de negociación correspondiente al mes en el que estamos que se asemeja más a un mes de agosto que al actual.
Todo ello, terminaría con una superación de la barrera de los 9.400 y posteriormente los 9.600 enteros que darían otro aspecto al Ibex español, pero mientras no ocurra, no hay nada más que rascar en este índice a menos que sea en contados valores que tendremos que saber muy bien elegir si no queremos vernos arrastrados por el ímpetu vendedor y presión bajista que se ceba en los índices europeos en estos momentos.